Relatoria

El seminario “Cambio de época y coyuntura crítica en la sociedad global”, organizado por el Instituto DEMOSPAZ, se celebró en la Sala Mixta, Edificio Plaza Mayor de la Universidad Autónoma de Madrid el día 14 de octubre.

Madrid, 14 de octubre de 2022

Bienvenida y presentación del seminario

Manuela Mesa, Codirectora del Instituto de Derechos Humanos, Cultura de Paz y no Violencia DEMOSPAZ – UAM y Directora del Centro de Educación e Investigación para la Paz (CEIPAZ) de la Fundación Cultura de Paz, da la bienvenida a las y los participantes y ponentes del Seminario. Presenta al Instituto, saludando al nuevo Director Javier Murillo elegido recientemente. Transmite la ilusión de realizar este seminario, una oportunidad única para poner en práctica el “diálogo de saberes”, muy importante para el Instituto DEMOSPAZ que busca la transdisciplinariedad como un elemento esencial para el análisis, la generación de conocimiento y la formulación de propuestas para abordar los retos globales desde un enfoque de derechos humanos. Se trata del noveno seminario que se realiza en el marco de la relación que tiene la Fundación Cultura de Paz y el Instituto DEMOSPAZ con el Gobierno Vasco y con el actual Departamento de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales. Agradece la presencia de José Antonio Rodríguez Ranz, Viceconsejero de Derechos Humanos, Memoria y Cooperación del Gobierno Vasco y Monika Hernando, Directora de Derechos Humanos, Víctimas y Diversidad del Gobierno Vasco, por todo el apoyo prestado en estos años y por hacerlo posible. Tras hacer un repaso de las temáticas abordadas desde el 20141, presenta el tema de este seminario. Es una ocasión para aprovechar los 15 años de edición del Anuario de CEIPAZ sobre paz y conflictos para hacer una reflexión sobre el momento actual en el que nos encontramos: ¿Estamos en un cambio de época? ¿Qué es lo que ha cambiado en estos 15 años? ¿Y qué escenarios de futuro se dibujan? Para inaugurar el seminario, pasa la palabra a José Antonio Rodríguez Ranz y a Mónika Hernando, representantes del Gobierno Vasco, y posteriormente a Federico Mayor Zaragoza, presidente de la Fundación Cultura de Paz.

José Antonio Rodríguez Ranz, Viceconsejero de Derechos Humanos, Memoria y Cooperación del Gobierno Vasco, agradece las palabras de Manuela Mesa y la oportunidad de aprender en este espacio. Las instituciones se mueven mucho en el ámbito de la acción y se echa en falta la reflexión. Destaca que este seminario se realiza en el templo de la reflexión (la universidad) y se promueve un debate abierto y propositivo. Es la misión de la universidad, que puede ser un actor clave para la transformación social, desde la perspectiva de los derechos humanos. Los derechos humanos están en un riesgo, hay que recordar que son una conquista histórica a lo largo de los años. Se exigen compromisos activos y acción colectiva. Además, reforzar los compromisos interinstitucionales es indispensable, así como también es importante esta oportunidad de aprender hoy de este triángulo virtuoso que reúne a la academia y a personas de instituciones.

Monika Hernando Porres, Directora de Derechos Humanos, Víctimas y Diversidad del Gobierno Vasco, agradece este espacio de reflexión colectiva y resalta la trayectoria de nueve años de trabajo conjunto, cuyas temáticas abordadas reflejan la evolución de las políticas vascas en materia de convivencia en derechos humanos. El próximo año, celebramos 75 años de la Declaración Universal de los Derechos Humanos y es importante buscar espacios de reflexión. Es cierto, esa tarea no siempre es fácil, el día a día conlleva otras dinámicas, sin embargo, pensar con personas que puedan aportar es importante.celebramos 75 años de la Declaración Universal de los Derechos Humanos y es importante buscar espacios de reflexión. Es cierto, esa tarea no siempre es fácil, el día a día conlleva otras dinámicas, sin embargo, pensar con personas que puedan aportar es importante.

Federico Mayor Zaragoza, Presidente de la Fundación Cultura de Paz, saluda a las personas participantes y resalta que el País Vasco ha sabido mantener sus principios y manera de pensar, rechazando la violencia. La violencia hace que las cosas que podrían ser una solución dejen de serlo. Esta reunión es importante para comprendernos, todos y todas en esta reunión nos estamos beneficiando de conocimientos varios. Es primordial destacar el papel de las universidades. Está preocupado, paulatinamente se está dando un giro de la universidad a lo privado. La universidad es educación superior y estamos dando lugar a iniciativas privadas, estamos confundiendo la visión de la universidad con una visión económica. La educación es “dirigir la propia vida, siendo libres y responsables”. Necesitamos gente libre y responsable. La universidad nos da incentivos para la esperanza: lo utópico se puede llevar a la realidad, con el trabajo de varias instituciones, entre ellas DEMOSPAZ.

Pensando en los principales cambios de estos últimos años, identifica dos momentos importantes e históricos: 1) el encuentro entre Gorbachov y Reagan en Reikiavik el 10 de octubre de 1986 en el cual se anuncia la inminencia de la caída del muro de Berlín, y 2) el dulce otoño de 2016 con la firma del Acuerdo sobre el cambio climático de París que sesumaba al compromiso de la Agenda 2030 para “transformar el mundo”. Se trató de un acuerdo importante, que nos devolvió la esperanza. Meses después, Donald Trump, al asumir su candidatura como nuevo presidente, dijo que no aplicaría la resolución firmada por Obama. Europa ante esa situación no dijo nada. Hay que hacer una cumbre con todos los países del mundo, una cumbre sobre el medio ambiente y la tierra. Ante toda esa situación debemos hacer algo, no puede ser que no hagamos nada al respecto, la única solución del mundo es el multilateralismo democrático, partiendo de la Unión Europea, porque si seguimos así, es posible que el cambio climático no tenga solución.

Bloque I: Cambios en el contexto internacional que explican el presente

Manuela Mesa, recuerda los objetivos de la sesión:

  • Identificar los principales cambios que se han producido en el sistema internacional en estos últimos 15 años, que son determinantes para explicar el presente y para garantizar el cumplimiento de los derechos humanos.
  • Analizar los escenarios de futuro que se dibujan y qué factores serán clave para avanzar en la democracia, la cultura de paz y los derechos humanos.

Todas las personas presentes tienen una larga trayectoria profesional en el análisis en el ámbito internacional o regional y el nexo de unión han sido sus contribuciones al Anuario sobre Paz y Conflictos de CEIPAZ.

En esta ocasión se analizarán los principales cambios que se han producido en el sistema internacional en los últimos 15 años desde un enfoque de Cultura de paz y Derechos humanos.

Manuela Mesa señala que ha habido algunos cambios en las fuentes y distribución del poder, profundas transformaciones en las estructuras económicas, sociales y políticas y en la naturaleza, las fuentes y las pautas de distribución y ejercicio del poder a escala global. Del avance de la globalización económica y la democracia liberal, se ha pasado a la emergencia de un mundo pos-occidental, más plural y diverso. Se han constatado los límites sociales y ecológicos de la globalización, y en sus fallas de gobernanza, tanto en el ámbito nacional, como en el internacional para abordarlos adecuadamente. La gobernanza de los asuntos globales en el marco multilateral se ha hecho más difícil y compleja, por el proceso de debilitamiento de las Naciones Unidas. Se plantea la urgencia de una refundación, que los países que integran el Consejo de Seguridad y que tienen derecho a veto bloquean.

En materia de paz y seguridad, más allá de la guerra de Ucrania y de otros conflictos enquistados, en estos años se han roto consensos internacionales que fueron forjándose durante años. Normas en materias clave como los derechos humanos, la democracia y la justicia se han roto. En el ámbito de los derechos humanos, se observa una cierta involución se han producido cambios en el contexto internacional, que suponen una amenaza para la protección, el fortalecimiento y la garantía de los mismos.

Además, el debilitamiento de la democracia, amenazada por una emergente ultraderecha, que cuestiona los fundamentos y el propio sistema democrático y trata de alcanzar el poder, a partir de la difusión de discursos de odio contra los inmigrantes, las mujeres y los grupos progresistas.

En tal sentido, formula una primera pregunta dirigida a José Antonio Sanahuja, que ha escrito en el Anuario sobre la crisis de la globalización: ¿cuáles son los hitos de esta crisis?

José Antonio Sanahuja, Director de la Fundación Carolina, plantea que ha habido una crisis de globalización. Nos encontramos en lo que Antonio Gramsci caracterizó como “interregno”: “La crisis consiste precisamente en el hecho de que lo viejo muere y lo nuevo no puede nacer: en ese interregno se verifican los fenómenos morbosos más variados”. Del uso del “interregno”3 como metáfora, pasamos a usarla como categoría analítica para explicar un momento en que se desmorona una estructura histórica y se pasa a un periodo no hegemónico (los interregnos son periodos no hegemónicos). Estamos en un sistema internacional en transición, en el que aún perviven elementos de la globalización, aunque esta habría dejado de ser una estructura histórica hegemónica, y aún no estarían definidos los contornos de la estructura que habrá de sucederle. El debilitamiento de las estructuras

hegemónicas que caracteriza a la crisis de la globalización, en tanto “interregno”, generó condiciones favorables para la aparición y ascenso de líderes y fuerzas nacionalistas y de extrema derecha que impugnan el orden internacional, con múltiples apuestas geopolíticas, e inestabilidad sistémica. Es el desmoronamiento de una estructura hegemónica, el interregno es un periodo no hegemónico. En la crisis de globalización, hay que distinguir factores estructurales causales: procesos de cambios productivos, límites ambientales de la globalización, límites sociales, límites políticos. En este punto es importante recalcar que al día de hoy existen actores ultranacionalistas que se nutren del descontento de lo que sucede en sus países. La guerra de Ucrania se produce porque las estructuras hegemónicas que la habrían podido impedir ya no están presentes. ¿Cómo podemos responder? Volviendo a citar a Gramsci: “No nos hacemos ilusiones, pero tampoco nos desilusionamos”.

Manuela Mesa formula la siguiente pregunta para Francisco Verdes Montenegro que ha escrito sobre las estrategias de seguridad y desarrollo: ¿Qué cambios se han producido en la concepción de la seguridad en estos 15 años? ¿Cuáles son los retos que se están planteando?

Francisco Verdes Montenegro, Investigador del área de Estudios y Análisis de la Fundación Carolina, da la enhorabuena por los 15 años del Anuario y recuerda unas reflexiones que hizo en su artículo publicado en el Anuario de 2017 sobre los presupuestos militares en tiempos de crisis en España. Ya van siete años consecutivos de subida de los presupuestos de defensa en España. Entramos en el octavo año y llama la atención que no hay un debate en la sociedad civil sobre cómo presupuestamos. No hay que perder de vista que las políticas de seguridad tienen que regularse. Lo que se presupuesta en operaciones de mantenimiento de la paz era exorbitante, en esta mesa plantea: ¿Por qué no se entra en los debates de presupuesto?

Manuela Mesa retoma el tema del crecimiento y la consolidación de la extrema derecha en el plano global y local. La amenaza a la democracia es algo que no se imaginaba y no estaba en agenda hace quince años. ¿Cómo se explica la emergencia de este fenómeno? Uno de los factores ha sido la utilización de las redes sociales, para expandir el mensaje, promover el odio y las noticias falsas. Formula esta pregunta a Miren Gutierrez ha analizado este fenómeno y en el Anuario explica cómo “las plataformas digitales han permitido la magnificación del alcance de los mensajes de la ultraderecha”.

Miren Gutiérrez, Profesora en la Universidad de Deusto y profesora invitada en la Universidad de Navarra, recalca que este fenómeno tiene que ver en primer lugar con la escasa capacidad algorítmica de Europa. Europa está liderando las investigaciones y publicaciones sobre análisis de Big data, pero no la puesta en práctica de estas investigaciones. No lidera la aplicación algorítmica ¿quiénes la están liderando? Hay una gran monopolización del Big data, existen granjas de servidores en China, India y EE.UU. En ese sentido, ¿cómo aumentar la soberanía algorítmica? ¿cómo capitalizar la investigación que se hace en Europa? El segundo factor es la plataformización de los contenidos que ha favorecido la extrema derecha y las teorías de la conspiración muy preocupantes. Por lo tanto, hay que alfabetizar lo digital en contra del discurso del odio, la decadencia de lo colectivo y la maximización del individualismo que nos está llevando a la crisis en la era de las plataformas. Termina su intervención diciendo que el

crecimiento de la extrema derecha amenaza las estructuras sociales, fomentan el foco en lo individual y van en contra de la acción colectiva, que tanto se ha mencionado a lo largo de la mañana.

Manuela Mesa pasa la palabra a Eva Botella-Ordinas, formulando esta pregunta: ¿Cuáles han sido los movimientos sociales más influyentes y que han favorecido cambios y transformaciones?

Eva Botella-Ordinas, Profesora contratada Doctora del Departamento de Historia Moderna de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM), explica que, en el ámbito del activismo, hay dos momentos cruciales en la historia contemporánea que son gran parte de la crisis del 2008 y la segunda crisis a nivel planetario que es la del COVID-19. El surgimiento de los movimientos sociales tiene causas estructurales y además hemos visto el surgimiento de empatía de movimientos sociales ante el COVID-19. En ese orden de ideas, hoy podemos observar que el movimiento en general ha sido coartado políticamente, hay medios de comunicación que enfocan la perspectiva fuera de los movimientos sociales, por tanto, es indispensable como punto de partida ante estas situaciones entender que se deben tomar las riendas desde abajo hacia arriba. Existen propuestas muy importantes como la renta básica universal. También es muy importante el papel de la memoria: tenemos que recordar la experiencia de la pandemia y las iniciativas de solidaridad y ayuda mutua que ha habido. Concluye recordando el rol del feminismo interseccional y los movimientos feministas ecologistas, que han puesto en el centro lo personal.

Manuela Mesa, retoma la importancia de las políticas de la identidad. Andrea Ruiz Balzola, en su artículo para el Anuario analiza las políticas de identidad y señala que “No tenemos una identidad, sino que habitamos identidades cambiantes y articuladoras a través de diferentes tipos de relaciones”. Las políticas de la identidad, quizás mejor políticas de la identificación, han sido necesarias y probablemente lo van a seguir siendo. Pero esto no significa necesariamente renunciar a lo común, a lo colectivo y a un nuevo sentido de la universalidad. Le plantea estas preguntas: ¿Hemos de renunciar a lo común y universal? ¿Se puede construir una acción política emancipadora universal desde la deriva actual de las políticas de la identidad? ¿Es posible hacer política sin el gesto emancipatorio de la universalización de intereses?

Andrea Ruiz Balzola, Investigadora en la Fundación Begirune y docente universitaria en la UNED, UPV y Deusto, retoma la cuestión de la falta de unidad de los movimientos sociales, señalando que existe un problema de cómo concebimos la identidad como algo dado y de la preponderancia de la “cultura de la diferencia”. Hemos pasado de las políticas de redistribución a las políticas de reconocimiento, que van de la mano, aunque analíticamente las separamos. Las políticas de reconocimiento se tildan como diferentes a la norma, son políticas de sectores que han estado excluidos históricamente. No obstante, las políticas de la identidad son preocupantes y pueden tener un enfoque victimista que está llevando a la parálisis de los movimientos sociales. Habla de una “jaula identitaria” que dinamita los puentes de diálogo. Ante eso ¿dónde está lo común de la diversidad humana? Ante eso el neoliberalismo está encantado con la separación. Los movimientos de izquierda tenemos el trabajo de contrarrestar ese tipo de narrativas y superar la fragmentación. Cree firmemente en la unidad psíquica de la condición humana.

En definitiva, reafirma la consigna de no caer en los esencialismos a la hora de referirnos a la identidad y lo universal.

Manuela Mesa pasa la palabra a Carlos Giménez Romero, que aborda en el Anuario la Cultura de la Mediación. ¿Podría ser esta una respuesta a los discursos de odio?

Carlos Giménez Romero, Catedrático emérito de Antropología Social en la UAM, afirma que para evitar que se nos dinamiten esos puentes planteados por Andrea, la cultura de la mediación es muy útil. La mediación es una herramienta de fortalecimiento de la democracia y de la cultura de paz. ¿Qué puede aportar a la democracia a las personas? Se trata de un ideal moral de ser ciudadanos. Las culturas no van a unir a las personas: lo que nos une es la dignidad y los derechos humanos. En el mundo progresista, en un principio no estaba muy bien vista la mediación, sin embargo, con el tiempo se vio cómo se construyó esa categoría y se ha pasado a hablar de la cultura de la mediación. Es el “poder de la palabra”, la figura tercera (entre dos partes), ese “no poder” de mediación que hace de ella un espacio de participación.

Se abre un turno de comentarios:

Lorena Ruano Gómez, Investigadora visitante de la Fundación Carolina e investigadora en Relaciones Internacionales visitante del CIDE (Centro de Investigación y Docencia Económicas, A.C. del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, CONACyT) afirma que en América Latina no solo es autoritaria la ultraderecha sino también la izquierda: los regímenes más autoritarios en América Latina son Cuba, Nicaragua y Venezuela, el liberalismo se sitúa en el medio. Más que una crisis de la globalización, ella ve una crisis del capitalismo como tal. En los últimos años se han acrecentado las desigualdades. Es primordial abordar el papel de los paraísos fiscales en Europa. Los movimientos sociales no tienen presupuesto ni los mismos recursos que tienen los grupos autoritarios y de extrema derecha que imponen su discurso, lo extienden en las redes sociales y cada vez más tienen una mayor influencia en la política. Formula una pregunta: ¿qué hacemos cuando hay grupos que no quieren dialogar?

Sergio García Magariño, Profesor en la Universidad Pública de Navarra e investigador de Estudios Sociales Avanzados, pone el foco en los retos de esta coyuntura crítica: el agotamiento de los sistemas de protección social, un desafío que se va tener que enfrentar derecha e izquierda y que no deja de ser un problema estructural. Muchas de las cuestiones que estamos abordando en el seminario son problemas sistémicos, para los cuales no tenemos herramientas para abordarlos de manera integral. Un ejemplo de ello es la crisis climática.

Blanca Rodríguez-Chaves, Profesora de Derecho Administrativo de la Universidad Autónoma de Madrid y Secretaria Académica del Instituto DEMOSPAZ hace una síntesis de los puntos que salieron mencionando los conceptos claves: crisis de la globalización, interregno, ruptura de consensos internacionales, plataformas digitales, alfabetización y Big data, movimientos sociales, memoria, feminismo interseccional, identidad en jaula, esencialismo, cultura de la mediación, ciudadanía, poder de palabra, liberalismo, presupuesto y a qué se destina el presupuesto.

Tras la recapitulación, se realiza una breve pausa.


BLOQUE II: Cambios en el Contexto Regional que Explican el Presente

Manuela Mesa da inicio a este bloque, en el que se analizarán los principales cambios que se han producido en el ámbito regional. En particular se analizarán los principales hitos que han marcado en Magreb y Oriente Medio, Estados Unidos y América Latina.

Algunas preguntas generales que enmarcan este bloque: ¿Qué cambios se han producido en relación a la democracia, los derechos humanos y la seguridad? ¿Cómo se han reorganizado los equilibrios de poder en las distintas regiones? ¿Qué países están jugando un papel de liderazgo? ¿Cuáles son las principales agendas de los movimientos sociales?

Formula una pregunta específica para Rosa Meneses, que en un artúculo en el Anuario de 2017 señalaba tres focos de tensión en el Mediterráneo: terrorismo, guerra y crisis de refugiados. ¿Podrías desarrollar más esta idea?

Rosa Meneses, reportera de la sección Internacional del diario EL MUNDO especializada en Oriente Próximo y el Magreb, inicia su intervención manifestando que ve el anuario como un continuo para reflexionar sobre lo que ocurre en el mundo. Un momento importante de los últimos años en la región del Magreb han sido las revoluciones árabes que en un plano positivo han puesto en el centro la ciudadanía de la región que demandaba dignidad y justicia. Siria por otro lado ha tenido una evolución terrible. Hemos visto una crisis de la política (los ciudadanos no creen en la política), y una crisis de la prensa (parcializada), en conexión con el uso de las redes sociales que han dado a los movimientos y activistas herramientas para poder salir de esa censura y poder remover esas narrativas. Otro aspecto positivo ha sido el ascenso de las mujeres en el centro de estos movimientos. El “reinado” de Trump ha sido disruptivo en dos contextos del mundo árabe: Palestina y el Sahara Occidental. El auge del populismo ha dinamitado lo poco que se había avanzado. Los saharauis y los palestinos son los más olvidados en el conflicto entre Argelia y Marruecos, y durante el periodo de Trump se han destruido y dinamitado los consensos internacionales que había en torno a esta situación. En el artículo de 2017 hablaba del terrorismo y no podemos olvidar que sigue estando ahí, en Mali parece que se está gestando una nueva crisis internacional y la región del Sahel, se está convirtiendo en el futuro foco de tensión e inestabilidad. Como grandes desafíos para la región están el cambio climático y las migraciones. Europa tiene una enorme responsabilidad y es un desafío como se abordan estas cuestiones.

Manuela Mesa formula la siguiente pregunta para Ignacio Álvarez Ossorio: ¿Qué ha pasado con las primaveras árabes?

Ignacio Álvarez Ossorio, profesor titular de Estudios Árabes e Islámicos en la Universidad Complutense de Madrid, inicia comentando que cuando hablamos de los cambios del norte de África en los últimos 15 años, la primavera árabe generó grandes expectativas y nos sorprendieron por la capacidad de resistencia civil que veíamos en ellas. Lamentablemente fueron esperanzas frustradas. Actualmente se puede decir que existen dos bloques en la región: 1) el bloque autoritario comandado por Arabia Saudí y Emiratos Árabes, y con influencia de Estados Unidos y 2) otro bloque autoritario pro- islamista encabezado por Turquía y Qatar, en favor de alianzas musulmanas. Las mismas causas que provocaron las Primaveras Árabes siguen vigentes en la actualidad.

Manuela Mesa pregunta a Isaías Barreñada sobre los conflictos enquistados: Sahara y Palestina.

Isaías Barreñada Bajo, Profesor de Relaciones Internacionales en la Universidad Complutense de Madrid e investigador asociado del instituto Complutense de Estudios Internacionales (ICEI) destaca que estamos hablando de conflictos que están en nuestro “vecindad”, en la que las relaciones entre los países son muy tensas: las fronteras entre Argelia y Marruecos, el sur de Melilla. El Mediterráneo es uno de los lugares con una de las brechas más grandes a nivel mundial porque existen grandes diferencias de renta y grandes desigualdades en el ámbito económico, social y político. Se trata de una “vecindad” en la que existen conflictos latentes y conflictos armados, conflictos de larga duración como el caso del Sahara Occidental. Es uno de estos conflictos que algunos denominan como “irresolubles” o “intratables”. A todo esto se añade la radicalización del discurso sobre las migraciones. Ha habido reajustes y reequilibrios. Se puede decir que “Estados Unidos is leaving, Rusia is back, China is coming y la Unión Europea is missing”.

La invasión rusa en Ucrania es considerada por los países de la región como “una guerra europea” o “nuestra guerra”, por el doble rasero que se aplica a unos conflictos y a otros. El conflicto del Sahara nos afecta de forma muy cercana, dado que el Estado español es responsable de un proceso de descolonización fallido. Todo el mundo se escandaliza por la agresión Rusia, cuando hay una ocupación de Palestina desde hace mucho tiempo por parte de Israel y este país no respeta las resoluciones de Naciones Unidas. Por otra parte, y se consienten las anexiones en el Sahara por parte de Marruecos. Se han normalizado estas situaciones y se constata la existencia de dos lógicas o dos varas de medir.

Manuela Mesa pregunta a Caterina García Segura y Josep Ibañez Muñoz sobre Estados Unidos, donde el legado de Trump y las consecuencias de sus políticas están muy presentes. ¿Cuáles son los cambios que se han producido en esos quince años? ¿Los principales retos y cambios que se han producido?

Caterina García Segura, Catedrática de Relaciones Internacionales en la Universidad de Pompeu Fabra (UPF) de Barcelona y Síndica de Greuges (Defensora Universitaria) de la UPF, inicia afirmando que, respecto a la política exterior de los Estados Unidos, lo que se observa es que la tendencia pendular de democráticas y republicanos supone un cambio de discursos, pero en la práctica es continuista (a pesar de la tendencia pendular). Estados Unidos ha visto amenazado su poder ante las potencias emergentes, por ello tiene dificultades de asimilar que tiene competidores serios que le restan hegemonía. Su papel como líder y fundador del multilateralismo hace que su actual abandono del multilateralismo tenga gran impacto en Naciones Unidas.

Josep Ibáñez Muñoz, Profesor Titular en la Universidad Pompeu Fabra, añade que es cada vez más relevante lo que pasó en el asalto al capitolio. Fue un evento de una trascendencia extraordinaria. ¿Fue un paréntesis o algo más profundo? Los movimientos de extrema derecha en el mundo están coordinados. Lo que vivimos en Europa no es ajeno a lo que pueda pasar en Estados Unidos. Afirma no estar seguro de que la globalización esté en crisis. Del mismo modo que hay una articulación de grupos de extrema derecha, se deben utilizar los instrumentos digitales para dar la batalla antidemocrática y contrahegemónica.

Manuela Mesa pasa la palabra a Javier Morales Hernández formulando esta pregunta: La guerra Rusia contra Ucrania: ¿Cómo hemos llegado hasta aquí?

Javier Morales Hernández, Profesor de Relaciones Internacionales en la Universidad Complutense de Madrid y especialista en Rusia, afirma que era inimaginable la guerra contra Ucrania. Más que tranquilizarnos acerca de las posibilidades de futuro, vemos un patrón de comportamiento en Putin desde hace un tiempo mucho más agresivo, de evolución que va en la dirección de empeorar la situación, de tomar decisiones cada vez peores. Con esta fase de la guerra avanzada no hay muchas esperanzas en que se tenga una solución en lo venidero y además hay amenazas de una guerra nuclear.

José Antonio Sanahuja toma la palabra para responder sobre la crisis de la globalización. Con la noción de “globalización” pasa lo mismo que con la de “fascismo”. Todo depende si la consideramos como periodo histórico o como categoría analítica. Considerando la globalización como periodo histórico (hasta 2008), sí se puede afirmar que está en crisis.

Angeles Saura, miembro del Laboratorio de Arte y Paz de DEMOSPAZ, reivindica el rol de los artistas en el análisis del contexto actual de coyuntura crítica. Sugiere la visión de la película “¿Teléfono rojo? Volamos hacia Moscú” de 1964.

Miren Gutierrez, toma la palabra para destacar el enorme papel de las plataformas en la construcción de ideologías. Las redes no son redes ni son sociales. En este “interregno” se pueden ver muchas situaciones liminales, como son por ejemplo la suspensión de los derechos de las personas migrantes.

Manuela Mesa pregunta a Laura Alonso sobre las posiciones del movimiento feminista pacifistas en el plano global.

Laura Alonso Cano, Presidenta WILPF – España (Liga Internacional de Mujeres por la Paz y la Libertad – Women’s International League for Peace and Freedom), afirma que el capitalismo necesita de otras herramientas como el patriarcado y el militarismo para seguir afirmándose. Comparte su duda sobre si realmente estamos en un momento de cambio de época o de continuidad. No podemos asumir los aumentos del presupuesto de defensa y el militarismo y que vamos a solucionar de esa forma la guerra de Ucrania. Afirma: “este tiempo me duele porque veo poco futuro y veo mal porque no hay compromiso en la academia en parar la guerra, no hay una mirada crítica y comprometida, no hay un cambio” Carlos Giménez Romero, Catedrático emérito de Antropología Social en la UAM, retoma la intervención de Laura Alonso para poner el foco en la pregunta: ¿el capitalismo está en crisis? No ve cambios y menciona tres cuestiones en donde ve continuidad: la prioridad de los mercados sobre los Estados, la mercantilización de todo, las relaciones internacionales dominadas por el capital financiero. Lee un extracto de un reciente artículo de Boaventura de Sousa Santos sobre las transiciones del mundo4: “Las nuevas dictaduras que se anuncian en el horizonte no prohíben la diversidad política partidaria, más bien eliminan la diversidad ideológica entre las diferencias partidarias. No eliminan la libertad, la reducen a un menú de libertades autorizadas. No hostilizan el ejercicio de la ciudadanía, inducen a los ciudadanos a hostilizarlo o a serle indiferente. No reducen la información, la aumentan hasta el agotamiento por la repetición siempre igual y siempre diferente de lo mismo. No eliminan la deliberación política, hacen que la deliberación sea tanto más dramática cuanto más irrelevante, dejando las «verdaderas» decisiones a cargo de entidades no democráticas”

Jose Antonio Sanahuja retoma la palabra para contestar y seguir sumando a las anteriores intervenciones. Todo el mundo está en contra de la guerra, pero hay que hacer un análisis fino de qué factores históricos concretos han llevado a esta guerra. Esto nos ayuda a diferenciar los escenarios históricos en la coyuntura de las dinámicas concretas. El capitalismo del siglo XVIII y de este siglo no son lo mismo. Por su parte, sí cree que estamos en un cambio de época.

Sergio García Magariño, en referencia a lo anterior manifiesta que con la guerra sufrimos todos y no tenemos instrumentos para tener la capacidad de detener los conflictos. Esta situación genera angustia. Acaba de volver de una estancia en Estados Unidos, donde la situación es dramática. Los politólogos están preocupados porque hay más de 1700 grupos armados hasta los dientes, anti inmigración, que perpetúan odio y racismo.

Se cierra así este bloque y se realiza una pausa para la comida.

Bloque III: El Futuro por escribir

Manuela Mesa da inicio a este bloque en el que vamos a reflexionar sobre los varios futuros por escribir. El espacio de la tarde es un espacio para soñar y también aterrizar algunas propuestas y pensar en cuáles actores son más relevantes. Algunas preguntas abiertas que se intentará contestar:

¿Qué propuestas están sobre la mesa para construir un futuro en paz?

¿Cuáles son las principales acciones que se deberían adoptar para lograr unfuturo en paz y sostenible?

¿Cuáles son los actores con mayor capacidad de cambio y transformación en laconstrucción del futuro por venir?

¿Qué futuro o futuros podemos imaginar?

¿Qué equilibrios de poder se irán gestando y que nuevos liderazgosinternacionales emergerán?

¿Cómo avanzar en la consolidación de la democracia?

¿Cómo consolidar el multilateralismo democrático? ¿Hay opciones para elcambio en el sistema multilateral?

Se abre el turno de las intervenciones, cuyas principales ideas incluyeron:

  • Es necesario avanzar hacia un sistema de seguridad colectiva que esté sustentado en el multilateralismo y para ello necesitamos herramientas globales y avanzar en los procesos de integración regional. Es urgente la reforma de Naciones Unidas y de su sistema de seguridad. También es preciso la transformación del sistema económico para reducir las enormes desigualdades. Y en todos estos procesos es esencial la inclusión de las mujeres en la toma de decisiones.
  • El Pacto verde europeo es una herramienta importante que se ha concretado en una serie de estrategias, que permitirán la reconstrucción del modelo socioeconómico y el impulso de la justicia climática. Pero es imperfecta porque el contexto internacional y en particular la invasión rusa en Ucrania ha obligado a acelerar ciertos procesos que requerían de una mayor consulta a la ciudadanía y a los colectivos afectados. Esto tiene como consecuencia que algunos sectores como las pesca o los bosques se vean afectados por esta transformación, sin a ver sido consultados.
  • Habría que avanzar hacia el “activismo de datos” y la alfabetización como propuesta. Se presenta la técnica de la Open Sources Intellingence. Existen organizaciones que están archivando todo tipo de datos sobre la guerra en Siria que en futuro serán evidencias, organizaciones que están desvelando estrategias muy sutiles contra los feminismos. Otra alternativa muy interesante: las agencias estatales se están aliando con la ciudadanía para llevar a los tribunales Google y otras multinacionales. En Estados Unidos se han realizado acciones en la calle. La alternativa que ella propone: activismo de datos y alianzas gobiernos-ciudadanos.
  • Una clave para el futuro es el ciudadanismo democrático. Tenemos cuatro problemas: cambio climático, desigualdad, ataque a la democracia y guerras. Cuando se habla de ciudadanía hay que entenderla como un gran ideal, una relación de personas libres e iguales, que tienen derechos y deberes porque pertenecen a una comunidad política, donde las instituciones garantizan el cumplimiento de los derechos. El problema está en la dificultad para avanzar en la conformación de la ciudadanía global. Para que haya con ciudadanía global tiene que haber instituciones globales. Hay dos cuestiones esenciales a tener en cuenta: 1) oponernos de forma radical al derecho al veto (es lo opuesto a la democracia) en las instituciones (tanto en Naciones Unidas como en la Unión Europea) y 2) hay que reformar que las Naciones Unidas al menos la mitad no pueden están formadas solo por naciones, tiene que estar la sociedad civil, mínimo con un 50%.
  • Fortalecer la solidaridad en un contexto de polarización y de políticas del odio. Superar lo que nos divide y avanzar en la conformación de una agenda compartida, que incluya la perspectiva de género, la ambiental y la democracia.
  • Necesitamos una herramienta fundamental que se nos está estropeando. La democratización de los medios de comunicación y redes sociales. Existen liderazgos claves que se orillan porque no hay medios que apoyen, han desprestigiado el 15M, como se trata el movimiento feminista. ¿Cuáles son los medios que hay que apoyar?

Para finalizar este bloque, toma la palabra Javier Murillo, Director de DEMOSPAZ-UAM y de la Cátedra UNESCO en Educación para la Justicia Social, que hace una recapitulación de las principales ideas y propuestas de este bloque sobre el futuro, a modo de cierre:

  • Situación de interregno, pasar de un reino a otro reino.
  • Ser realistas porque en la medida que planteemos medidas complejas seremosescépticos para los cambios
  • Proceso de construcción política en la Unión Europea y reforma de NacionesUnidase que propicie la paz
  • Ciudadanismo democrático
  • Activismo de datos
  • Alianza sociedad y gobierno en contra de las corporaciones
  • Auge y apoyo a movimientos sociales
  • Apoyo a medios de comunicación

Por último, Manuela Mesa pasa la palabra a Federico Mayor Zaragoza, para las reflexiones finales de la jornada.

Federico Mayor Zaragoza, presidente de la Fundación Cultura de Paz, cierra diciendo que en esta sesión se ha reflexionado sobre el futuro por escribir. Ahora debemos pensar cuales son aquellas cosas que han cambiado de tal manera que podamos llevar a cabo estas excelentes líneas de futuro. Por primer a vez en la historia ahora podemos hacerlo. De todo lo que se ha dicho, la clave es que haya una ciudadanía responsable y consciente. Antes la mayoría de las personas nacía, vivía y moría en pocos km cuadrados. Ahora la tecnología digital nos permite expresarnos y participar (aunque sabemos que tiene también aspectos peligrosos). Hoy se ha hablado del gasto militar: no puede ser que se gasten 4 mil millones de dólares al día en gastos militares. Necesitamos un nuevo concepto de seguridad: una seguridad humana. De ello habla en su último libro sobre “Inventar el futuro”. También llama a una ciudadanía consciente, libre y responsable. Cita a Edgar Morín, que en el día en el que cumplió 100 años dijo: “Ahora ha llegado el momento de cumplir los deberes intergeneracionales”. Es necesario primero “atreverse a saber” y luego también “saber atreverse”. Concluye con una cita de Albert Camus: “los desprecio porque pudiendo tanto se atrevieron a tan poco”.